La Hermandad de María al Pie de la Cruz nace en el año 1939 bajo la denominación de “Soledad de la Virgen”. Fue entonces cuando se le encargó la talla al escultor Enrique Casterá y Masia de Alzira (Valencia). Al llegar la nueva imagen a Aspe en 1940 y por la fisionomía de la misma, se decide cambiar su nombre por el de “María al Pie de la Cruz”. La imagen de la Santísima Virgen María, que toma parte en la procesión del Domingo de Resurrección, es obra de José Romero Tena de Valencia y fue realizada en el año 1945, aunque en los primeros años no fue la Hermandad de María al Pie de la Cruz la encargada de sacarla en procesión.

En el año 1968, la Hermandad se hizo cargo de todo el patrimonio de la Archicofradía del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, ya que ésta tenia serias dificultades para procesionar. Para diferenciar cuando la Hermandad salía a la calle con las imágenes de la Archicofradía, se incluyó en la vestimenta una capa de color blanco que solo se ponía en esas ocasiones. De esta forma, la Hermandad se hizo cargo también de las imágenes del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, Santo Sepulcro y Flagelación del Señor hasta el año 1982. En el año 1970, la Hermandad adquiere también la imagen de Cristo Resucitado para la “Mañanica de Pasuca” al dejar de hacerlo el Santísimo Sacramento. Ésta imagen procede de los Talleres de El Arte Religioso de Olot.

En el año 1983, la Hermandad devuelve todo cuanto poseía del patrimonio de la Archicofradía del Santísimo Cristo de la Buena Muerte para que ésta pudiera retomar sus procesiones. Sin embargo, continúa procesionando con la capa blanca, perdiéndose la tradicional capa de color azul utilizada desde los inicios de la Hermandad. Al devolver todo este patrimonio, la Hermandad vio notablemente reducida su participación en las procesiones de la Semana Santa aspense, por tanto, decide adquirir nuevos pasos. De esta forma, llega la Caída de Jesús en el año 1984 procedente de los Talleres El Arte Religioso de Olot (Gerona); y en 1988 Nuestro Padre Jesús Cautivo, tallado por Valentín García Quinto de Albatera (Alicante).

En el año 1998 la Hermandad sustituye su atuendo, pasando a ser la capa de nuevo del tradicional color azul, y tanto ésta como la túnica en terciopelo, manteniéndose el capirote y el fajín en raso blanco. También se creó en ese año la cuadrilla de costaleras para Nuestro Padre Jesús Cautivo, que pasó a contar con una vestimenta propia sustituyendo la capa por una casulla.

En el año 2000, la Hermandad decide recuperar uno de los pasos que fueron destruidos en el año 1936 bajo la denominación de “Monte Calvario”, y que engloba sobre el trono todos los atributos relacionados con la muerte de Cristo. Por ese mismo motivo el paso anterior a 1936 llevaba por nombre “Los despojos de la Pasión”, aunque popularmente era conocido como “El pasico del cojo”.

En el año 2002 se crea el actual trono de la Caída de Jesús, y al año siguiente se adquiere un nuevo trono para la Santísima Virgen María, así como una corona nueva para esta imagen, todo ello obra de la Metalistería y Orfebrería de los Hermanos Martínez de Redován (Alicante). En 2004 el músico aspense Antonio Espín Moreno compone “María al Pie de la Cruz”, marcha de procesión dedicada a la Hermandad. Es entre los años 2010 y 2011 cuando se restaura el trono de María al Pie de la Cruz.